Me econtraba, como suelo hacerlo habitualmente, en una librería comprando un libro para regalar. En estas ocasiones, es una costumbre en mí aprovechar para realizar una breve recorrida por los lugares donde las distintas obras se exponen más a la vista del cliente, o que se encuentran en los sitios destinados a promocionar las novedades recientemente disponibles para la venta.
De repente, atrajo mi atención el título de una obra: "Audaz, productivo y feliz" - Una guía para conseguir objetivos increíbles y dominar tu vida personal y profesional; pero no fue ello lo que me decidió a adquirirla sino el darme cuenta que su autor es, nada más y nada menos, que -en mi opinión- un "Gran Maestro" de nuestro tiempo: Robin Sharma (uno de los mayores expertos en liderazgo, crecimiento personal y formación de altos ejecutivos; además de ser un conferenciante muy solicitado. Algunos de sus libros entre los cuales se incluye "El Monje que vendió su Ferrari" han sido publicados en más de cincuenta y cinco países y alcanzado los primeros puestos en las listas de best sellers de todo el mundo).
Y ni lerda ni perezosa me aboqué a su lectura.
Hoy quiero compartir con todos ustedes, algunas reflexiones que me han conmovido profundamente.
He aquí la primera de ellas (páginas 31 a 32):
"... La pregunta de Steve Jobs
Ultimamente he pensado mucho en Steve Jobs, el difunto consejero delegado de Apple: en cómo triunfó con el iPod, en cómo cambió Apple, en sus éxitos con los estudios cinematográficos Pixar... Era, por lo que he ido viendo, una persona muy interesante, inteligente, impetuosa, apasionada... Y también un filósofo.
Jobs vivió una temporada en la India formándose. Estudió con los hombres sabios, estuvo en retiros de meditación, reflexionó sobre las grandes preguntas de la vida... Por cierto, he oído que Jobs se hacía una pregunta muy concreta cada vez que debía tomar una decisión importante en su vida: <¿Qué haría si fuera la última noche de mi vida?>. Me encanta.
Nadie se ha arrepentido en su lecho de muerte de los riesgos que asumió en su vida. No hay ningún lugar menos seguro que la zona de seguridad. Para tener una existencia plena es imprescindible correr riesgos calculados, y hacerlo a menudo. Quien no se atreve nunca gana. Así fue como conoció Steve Jobs a su mujer: estaba en la universidad dando una conferencia y la vio entre el público. Al final de la conferencia se la presentaron, y él sintió el impulso de invitarla a cenar, pero tenía una reunión de trabajo. De canimo al coche se hizo una pregunta: <¿Qué haría si fuera la última noche de mi vida?>. Así que volvió corriendo a la sala de actos, la encontró y desde entonces no se separaron.
Es muy buen momento para reflexionar. Te despides de un año y das la bienvenida a otro. Profundiza. Reflexiona en lo que tenías que hacer y no has hecho porque se interpuso el miedo. Piensa en lo deprisa que se va la vida, y en lo que queda por hacer para que consideres que lo has dado todo como ser humano. Y luego, sal al mundo y lúcete. A todos nos beneficiará...."
Y, a continuación, la segunda de ellas (páginas 69 a 70):
" ... Las múltiples formas de riqueza
¿Qué es la riqueza? A mi modo de ver hay muchas formas de riqueza. La mayoría de la gente ve la riqueza como algo relacionado exclusivamente con el dinero, pero yo considero que son cinco sus modalidades: riqueza económica, riqueza en relaciones, riqueza física, riqueza en aventuras y lo que llamo riqueza psíquica (que consiste en llenar tu vida de sentido). Creo que si uno no se ocupa de todas ellas tendrá una vida vacía.
La riqueza económica es una obviedad. El dinero es importante para sacarle el máximo partido a la vida. Es necesario para viajar, o pagarles las clases de tenis a los hijos, o la universidad, pero es tan solo una de las formas de riqueza. No basta con tener dinero para alcanzar la verdadera riqueza. También hay que ser rico en relaciones, lo cual consiste en sentirse conectado con otros seres humanos y crear una comunidad fuerte y afectuosa a su alrededor. Otra riqueza que debemos conseguir es la física: sin salud uno no tiene nada. Nadie quiere ser el más rico del cementerio. También es importante trabajar en la creación de una riqueza en aventuras. Esta consiste en tener sentido de la pasión, y en ser rico en lo que se refiere a aventuras vividas durante nuestro periplo vital. Este tipo de riqueza puede forjarse a base de viajes exóticos, o bien viviendo microaventuras como probar un nuevo tipo de comida o mantener nuevas conversaciones con una persona interesante. Por último, para ser ricos de verdad debemos crear una riqueza psíquica. La necesidad más profunda del coraxón humano es vivir por algo más importante que uno mismo. Una felicidad duradera sólo puede derivarse de lo que le damos al mundo y quienes nos rodean, en contraste con lo que recibimos. La riqueza psíquica consiste en vivir por una causa que es más grande que tú.
Muchos nos flagelamos por no poseer tanto riqueza económica como nos gustaría. El dinero es importante para sacarle el máximo partido a la vida, pero no lo es todo. Hay muchos ricos que en el fondo no lo son. Trabajar en cada una de estas cinco formas de riqueza te aportará la inspiración necesaria para llegar más alto, soñar más a lo grande y disfrutar de una verdadera plenitud al saborear ese regalo que llamamos vida...."
Quiero terminar este compartir con una cita que se encuentra en la página 71 de este "magnífico libro":
Bendiciones.
La riqueza económica es una obviedad. El dinero es importante para sacarle el máximo partido a la vida. Es necesario para viajar, o pagarles las clases de tenis a los hijos, o la universidad, pero es tan solo una de las formas de riqueza. No basta con tener dinero para alcanzar la verdadera riqueza. También hay que ser rico en relaciones, lo cual consiste en sentirse conectado con otros seres humanos y crear una comunidad fuerte y afectuosa a su alrededor. Otra riqueza que debemos conseguir es la física: sin salud uno no tiene nada. Nadie quiere ser el más rico del cementerio. También es importante trabajar en la creación de una riqueza en aventuras. Esta consiste en tener sentido de la pasión, y en ser rico en lo que se refiere a aventuras vividas durante nuestro periplo vital. Este tipo de riqueza puede forjarse a base de viajes exóticos, o bien viviendo microaventuras como probar un nuevo tipo de comida o mantener nuevas conversaciones con una persona interesante. Por último, para ser ricos de verdad debemos crear una riqueza psíquica. La necesidad más profunda del coraxón humano es vivir por algo más importante que uno mismo. Una felicidad duradera sólo puede derivarse de lo que le damos al mundo y quienes nos rodean, en contraste con lo que recibimos. La riqueza psíquica consiste en vivir por una causa que es más grande que tú.
Muchos nos flagelamos por no poseer tanto riqueza económica como nos gustaría. El dinero es importante para sacarle el máximo partido a la vida, pero no lo es todo. Hay muchos ricos que en el fondo no lo son. Trabajar en cada una de estas cinco formas de riqueza te aportará la inspiración necesaria para llegar más alto, soñar más a lo grande y disfrutar de una verdadera plenitud al saborear ese regalo que llamamos vida...."
Quiero terminar este compartir con una cita que se encuentra en la página 71 de este "magnífico libro":
"Al despertar cada mañana, piensa en el valios privilegio
que significa estar vivo, respirar, pensar, gozar, amar."
Marco Aurelio
Bendiciones.